El sábado 6 de Julio de 2013 recibí el 4 to Dan de Aikido de parte de Aikikai Japón, dirigido por Moriteru Ueshiba Sensei por intermedio del Centro de Difusión del Aikido, presidido por Leonardo Sakanashi Sensei.
El Aikido transforma en el Hacer al Ser.
Tomando lo que he escuchado de Humberto Maturana como una de sus leyes Sistémicas “todo lo dicho es dicho por un observador a otro observador que puede ser el o ella misma”Todo lo que diga del Aikido no es como el Aikido es, es sólo como me ocurrió a mi en estos 23 años de práctica ininterrumpida.
En mi paso por el mundo del tenis profesional, viví los dolores y alegrías de lo que este mundo significa.
Con mucha fuerza sentí la necesidad de entender lo humano, el comportamiento, el desarrollo interior.Veía películas de Samurais y me impactaba su particular manera de aprender, de entrenarse, de disciplina y de mejora continúa.
Esta curiosidad me llevo a incursionar en el mundo de las artes marciales y disciplinas orientales.
Comencé en 1986, en este agosto del 2013 son 27 años de este fascinante camino.Llegue a 1er Dan de Karate Shorin Ryu en la Escuela de Sensei Shoei Miyazato.
En 1990 conoci a Sensei Masafumi Sakanashi, sentí gran curiosidad por lo que vi de su persona y la amabilidad y respeto con la que se movían los practicantes.
Seguí practicando un tiempo ambas disciplinas, hasta que Aikido ocupo todo el tiempo de actividades físicas, también mentales y espirituales.
No hay definición de lo que el Aikido es, cualquier explicación no llega a captar su esencia y lo que sea dicho solo es una explicación de quien la cuente.
Esta es mi historia, la que me hace sentido contar, feliz por el logro de lo conseguido a hoy y en la confianza de lo que sigue a futuro.